Irene ya ha soplado 106 velas. Esta abuela con más de un siglo de vida es una de las más longevas de la Comunidad de Madrid. Asegura tener "algunos achaques de la edad" pero la memoria no le falla y el pulso, mucho menos. Lo demuestra cada día durante sus partidas de cartas porque Irene sigue ganando a su familia a la hora de la merienda. Y lo hace, presten atención, espejo en mano y sin despeinarse lo más mínimo. Ya saben... la experiencia es un grado.