La propietaria de esta vivienda, situada en la colonia Albéniz, le costó casi 4 años conseguirla porque no salía ninguna a la venta. Enamorada de esta zona de Madrid por sus orígenes vinculados a los músicos y los artistas, la compró en 2005 y asegura que sigue manteniendo la esencia bohemia de sus orígenes, aunque con una diferencia evidente: poco o nada queda ya de aquellas casitas bajas humildes que fueron en sus orígenes. Ahora pertenecen a uno de los barrios más cotizados de Madrid.