(Actualizado

En la localidad madrileña de Villaconejos se encuentra el taller de Miguel Ángel Laguna, uno de los imagineros y restauradores de arte sacro más prestigiosos y reconocidos.

Este artista sacro reconoce que siempre ha tenido una gran inquietud por el arte, a lo que se sumó que su abuela fuera aficionada a leer las vidas de los santos. Dos hechos que, según nos cuenta, se fusionaron en él de pequeño: “el mundo del arte con esa pasión de mi abuela por esa iconografía y la vida de los santos”.

Ruta 179: Villaconejos

Los principales clientes de Miguel Ángel son iglesias, ayuntamientos, hermandades y cofradías, que le piden restauraciones de pinturas, tejidos, esculturas… “Siempre hay un dedo roto o una imagen que está desconchada”, explica el artista, encargado de dejarlas como nuevas.

Miguel Ángel tiene su propio taller en Villaconejos, donde confiesa que está “de sol a sol. Es mi cueva”. Desde allí manda su arte no solo a toda España, sino al resto del mundo, como al Líbano o a Jerusalén. “No solamente salen de Villaconejos melones y vino”, dice entre risas.

Descubrimos en Villaconejos el truco definitivo para saber cuándo un melón está bueno

En la Iglesia de Betfagé, que se ubica en el Monte de los Olivos de Jerusalén, se encuentra un cristo realizado por el artista de Villaconejos. Y no es el único proyecto que tiene en la ciudad israelita, ya que en unos meses irá a pintar una capilla.