¿Nos estamos quedando sin antibióticos?

Se sabe que los antibióticos solo hay que tomarlos cuando lo indica un profesional de la salud, en la dosis adecuada y por el tiempo indicado. Sin embargo, no siempre llevamos a raja tabla las indicaciones de nuestros doctores y solemos guardar unos antibióticos extra “por si acaso”.

Estos fármacos, aunque pensemos lo contrario, no tienen ninguna utilidad para tratar: fiebre, resfriados o dolores de garganta. De hecho, si se produce un mal uso, dejan de ser eficaces.

La utilización excesiva de antibióticos contribuye a ampliar la resistencia de las bacterias a los medicamentos. Estamos ante una grave falta de nuevos fármacos en fase de desarrollo para combatir la creciente amenaza de la resistencia antimicrobiana. El prestigioso catedrático de medicina preventiva, Ángel Gil, nos habla de las soluciones a este problema mundial.