Carmen Lomana es una empresaria de éxito que ha sabido superar los reveses de la vida con una mezcla equilibrada de fortaleza y estilo. Piensa que cada día es un regalo y lo disfruta minuto a minuto, sola o en compañía.
Conversamos con ella en el Hotel Orfila, su lugar favorito para tomar el té. Construido en 1885 como residencia privada de una familia aristocrática, a principios del siglo XX su jardín fue famoso en Madrid por las obras teatrales que allí se representaban.