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Alcalá de Henares también se suma a las restricciones de tráfico. Los coches no volverán a circular en su núcleo central. El gobierno municipal anunció un plan de semi-personalización en la zona, y ahora da un paso más con el cierre total a la circulación.

El pavimento sustituye al asfalto. Y los coches y autobuses que durante décadas han circulado en torno a la plaza dejaran paso a los peatones.

Cierre total

En mayo pasado se daba a conocer el proyecto municipal de semi-peatonalizar la almendra central. La circulación de coches quedaba limitada a un único carril en la calle Libreros y un lateral en la Plaza Cervantes.

Finalmente, con el avance de los trabajos, la decisión ha sido la del cierre total al tráfico. Una medida impulsada dicen por la favorable acogida de los vecinos y la posibilidad de regular el tráfico de forma perimetral entorno al centro.

Los trabajos con un presupuesto total de casi dos millones de euros se esperan completadas en uno o dos meses.