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La presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas dice que no apoyará ninguna moción de censura en Madrid. Su intención no era romper con Ayuso, a quien acusa de incumplir el acuerdo de gobierno. Lo cierto es que Sánchez y Arrimadas vuelven a entenderse, de momento, solo en Murcia, donde sus formaciones se harán, previsiblemente, con el Gobierno de Murcia y la alcaldía de la capital.

En declaraciones a los medios de comunicación tras asistir al acto de homenaje de la Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT) en recuerdo de las víctimas de los atentados del 11-M en el Parque de El Retiro, en Madrid, Arrimadas ha revelado que informó vía telefónica a Pablo Casado de las mociones de censura que Ciudadanos iba a presentar junto al PSOE en la Región de Murcia y en el Ayuntamiento de la capital, y ha lamentado que él no le comunicara las intenciones de Díaz Ayuso.

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Tras defender que en Murcia había que actuar, porque Ciudadanos no estaba dispuesto a "tapar la corrupción o las malas prácticas" del PP, ha negado que este movimiento formara parte de "una maniobra orquestada por Moncloa".

En el caso de los presidentes de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, y de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, "lo han cumplido perfectamente", pero Díaz Ayuso "no ha cumplido el acuerdo" y "ha quedado como una irresponsable", ha añadido Arrimadas.

PP y Ciudadanos se acusan de irresponsabilidad

El Gobierno de Pedro Sánchez, no oculta que le encantaría que la decisión de Ciudadanos en Murcia no sea algo aislado. Lo dice la portavoz del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero que considera que el panorama que se ha abierto tras la ruptura de Ciudadanos con el PP en Murcia al presentar una moción de censura con el PSOE, debería servir para que el partido de Arrimadas decida "qué quiere ser de mayor", y elija abandonar el "tripartito de derechas que gobierna en varias comunidades a pesar de la victoria del PSOE".

Lo cierto es que la decisión adoptada en Murcia, no ha gustado a todos en el partido naranja. El coordinador en la Comunidad Valenciana, Toni Cantó, ha admitido su discrepancia con la actuación de su partido en Murcia y ha avanzado que pedirá explicaciones a la dirección, al revelar que ni él ni "gran parte de la Ejecutiva" conocía esa decisión.Más contundente se ha mostrado el diputado de Ciudadanos en Andalucía Fran Carrillo quien aseguraba que "toda la clase política damos vergüenza" porque en medio de una pandemia, con cientos de muertos cada semana, están hablando de cambiar gobiernos.