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Sube el paro y la pérdida de empleo se transforma en una situación muy complicada económicamente para muchas familias. Asociaciones vecinales denuncian, incluso, que la pobreza en Madrid corre el riesgo de convertirse en estructural. Crecen las ‘colas del hambre’ en nuestra región y lo hacen, cada vez, en más zonas.

En apenas un año las asociaciones benéficas, como la Fundación Madrina o Cáritas, han pasado de atender a 400 familias al mes a 4.000 al día. Una situación que se vuelve insostenible.

Muchas de las personas de las 'colas del hambre' corren el riesgo que perder también su hogar | TELEMADRID

Muchas de las personas que integran las llamadas ‘colas del hambre’ son jóvenes, ya que en Madrid uno de cada tres menores de 25 años está sin empleo, colas donde hay también mucho inmigrante, sector que tiene el doble de probabilidades de quedarse sin empleo.

Petición de ayuda

Las asociaciones hacen un llamamiento para pedir ayuda y dicen que no deberían llamarse las ‘colas del hambre’ sino también las ‘colas de los sin techo’ porque además muchos de ellos están perdiendo su hogar.

Piden donativos tanto materiales como económicos. “Que la gente cuando nos vea puedan aportar alimentos y ayuda –piden los voluntarios de la Fundación Madrina- porque nos faltan alimentos”

Una voluntaria pide ayuda para atender a las personas necesitadas | TELEMADRID

A las colas vienen también empresarios que han tenido que cerrar sus negocios, trabajadores en ERTE y jóvenes desempleados.

En Cáritas de Las Rozas, un municipio de elevada renta per cápita, están atendiendo ahora mismo a 200 familias cada 15 días. “Hay que tener esperanza y empuje para poder seguir, sobre todo porque tengo un hijo”, dicen algunos que guardan cola.