Bildu cambia el rumbo de la campaña electoral del PSOE

La denuncia que hizo Covite ha cambiado el rumbo de la campaña electoral y ha provocando incluso que, desde el PSOE, se haya ido cambiado la estrategia de respuesta a la polémica, pasando del silencio inicial, al posterior ataque al Partido Popular por hablar de ETA.

El pasado día 9 el Colectivo de Víctimas del Terrorismo (Covite) denunció que 44 integrantes de la lista de Bildu a las elecciones era integrantes de ETA y que siete de ellos habían sido condenados por asesinato. Con Bildu el PSOE ha pactado y llegado a acuerdos durante toda la legislatura y la denuncia afectaba a la campaña electoral.

En principio, los barones socialistas se desmarcaron conscientes del daño electoral pero a Ferraz no le quedó otra opción que enviar un vídeo en el que se condena la inclusión de los etarras pero señalando al Partido Popular.

El PSOE estaba determinado a pasar página de manera rápida pero no ha podido impedir que el asunto persiga a Sánchez hasta Washington. Allí, finalmente, se mostró contundente.

Ahora el PSOE ha celebrado que los siete condenados por asesinatos de ETA que iban en las listas de EH Bildu para las elecciones del 28 de mayo hayan renunciado a ser concejales en el caso de ser elegidos, ya que considera que es "una victoria de las víctimas".

El PP ha puesto en duda la renuncia de los siete condenados por asesinatos de ETA a ser elegidos como concejales de EH Bildu al tiempo que ha presionado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para que frene estas candidaturas con la Abogacía del Estado o a través de la Fiscalía.