Vídeo: REDACCIÓN | Foto:Telemadrid
(Actualizado

El presidente turco y el estadounidense dan a Jamal Khashoggi por muerto.

Aunque con todo por esclarecer, las pruebas apuntan a que quien ordenó el asesinato fue el príncipe heredero, por las críticas de Khashoggi hacia su figura.

Los investigadores turcos rastrean un parque de Estambul, porque piensan que los agentes saudíes sospechosos de matar, descuartizar y disolver en ácido al periodista se deshicieron de sus restos allí, hasta donde una furgoneta negra de la delegación saudí, fue el 2 de octubre.

De los 15 sospechosos ya sólo viven 14. El otro moría en un accidente de tráfico en Riad este jueves por la tarde.

Lo que los investigadores turcos parecen tener claro es que el periodista murió dentro del consulado, pero la pregunta es por qué le estaban esperando para matarlo.

Jamal Khashoggi estuvo al servicio a la monarquía pero cuando pidió una mínima apertura, el príncipe heredero lo colocó en su punto de mira.

Khashoggi se marchó y comenzó a escribir columnas para The Washington Post, en las que incluso comparó al príncipe con Vladimir Putin.

Desde Riad llegaron llamadas para que parase. Decidió casarse y trasladarse en Turquía, estando aún bajo la protección de Occidente.

Una protección que no fue suficiente. Vinieron a buscarlo y hacia quien apuntan ahora todas las miradas, como último responsable de su caza, es al príncipe saudí.