Los vecinos de Malasaña están hartos de las pintadas en las fachadas de sus edificios. Y no es una denuncia abstracta, es tan concreta como que el 87% de los vecinos de Malasaña tienen y sufren estas pintadas.
Cansados de borrarlas y que vuelvan a aparecer, residentes y comerciantes han iniciado una campaña para remover conciencias.
Invadidos por las pintadas
Una de las vecinas, Elvira, está cansada de limpiar todos los días los grafitis de su peluquería de Malasaña.
Las pintadas han invadido el barrio y los grafiteros no tienen compasión, ni con comercios, garajes, viviendas, o paredes.
Otro vecino, Carmelo, ya ha fotografiado más de 200 grafitis. Para los vecinos del barrio esto no es arte, es vandalismo.
Por eso junto a los comerciantes, han iniciado la campaña ‘Tu firma vale mucho pero aquí no’ para concienciar del perjuicio que suponen los grafitis para la zona.