Sacar la silla a la puerta de casa para ver pasar la vida cotidiana y charlar con los vecinos. Es una escena muy habitual en nuestros pueblos sobre todo en las tardes de verano.
El ayuntamiento de la localidad gaditana de Algar, de apenas 1.500 habitantes, ha presentado una propuesta a la Junta de Andalucía para que sus "charlas al fresco" sean declaradas Patrimonio Cultural Inmaterial de la UNESCO.
"El proceso requiere de un expediente complejo que debe pasar primero por declarar lo que se quiera presentar como Bien de Interés Cultural de Andalucía (BIC), algo que se demora aproximadamente un año", ha explicado la consejera de Cultura y Patrimonio Histórica de la Junta de Andalucía, Patricia del Pozo.
La consejera ha resaltado que cualquier iniciativa "que nace apoyada por la sociedad" hay que "estudiarla", ya que "si le cerramos la puerta, a lo mejor estamos perdiendo una nueva propuesta de bien de interés cultural en nuestra región". "Aquí se estudia todo y, por supuesto, esa también", ha abundado.