Comportamientos temerarios en algunos parques precintados de Madrid

Los estragos de Filomena son aún visibles tres semanas después. Montones de nieve endurecida en algunas partes y sobre todo árboles tronchados, caídos o a medio caer.

A pesar de que los parques están precintados, muchos hacen caso omiso a las recomendaciones y siguen acudiendo a pasear sus mascotas o a hacer ejercicio.

Es una "temeridad" como señalan algunos vecinos que viven cerca de estos pequeños bosques urbanos. La prudencia lleva a dar un rodeo para no cruzar el parque, aunque sea el camino más corto.

El 60% del arbolado de Madrid resultó afectado primero por la nevada y luego por el episodio de rachas fuertes de viento. El Ayuntamiento cifra en unos 800.000 los ejemplares afectados de los que el 10% son irrecuperables. O han caído o habrá que derribarlos y luego reponerlos.

La Comunidad de Madrid ha iniciado un proyecto para clonar algunos de los árboles singulares de la región que resultaron afectados por el temporal.