Crecen las donaciones en la investigación contra el cáncer

Los "amigos del CNIO" (el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas) han conocido el trabajo que están llevando a cabo nueve jóvenes investigadores gracias a sus aportaciones, que se destinan en su integridad a la investigación de algunos de los aspectos más novedosos de la investigación del cáncer.

Más de cien de esos "amigos" han participado en una jornada organizada en el CNIO y han conocido personalmente a los investigadores postdoctorales que esta institución científica ha contratado con sus donaciones.

Desde que el CNIO puso en marcha esta iniciativa, más de treinta jóvenes investigadores (nueve este año) se han incorporado con contrato a diferentes grupos de trabajo y han logrado y publicado importantes avances relacionados con tumores pediátricos, metástasis, cáncer de mama, de pulmón, hepático o cerebral.

Este lunes, Bárbara Hernando (del grupo de Oncología Computacional), Lluís Cordón (del grupo de metástasis cerebral), Elena Jiménez (del grupo de integridad genómica y biología estructural), Ana María Roncero (de la unidad de investigación clínica del cáncer de mama) o Ivo Hernández (del grupo de inestabilidad genómica) han mostrado a los "amigos" del CNIO lo que sus donaciones les están permitiendo descubrir.

Todos los jóvenes investigadores han trasladado a los donantes un mensaje de agradecimiento y se han comprometido a intentar que sus aportaciones se conviertan pronto en innovaciones que puedan estar al servicio de los pacientes en la práctica clínica.

La investigación es la única forma de avanzar en la búsqueda de nuevos tratamientos, más eficaces y personalizados, para combatir el cáncer, han subrayado los jóvenes científicos, y han apuntado que los donantes que se han comprometido con sus aportaciones (en muchos casos simbólicas pero también con importantes cantidades) son una parte de esa solución.

El programa "Amigos/as del CNIO" agrupa ya a unas 2.300 personas, cuyas aportaciones superaron el pasado año el millón de euros con los que se financia directamente el salario de los investigadores postdoctorales que se incorporan al CNIO.

La directora de Filatropía del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas, Jessica Rose Joy, ha trazado el perfil del donante y ha señalado que hay personas de todas las edades, desde niños que hacen aportaciones simbólicas hasta personas mayores, y que en la mayoría de los casos son personas que han estado directamente relacionadas con la enfermedad (ellas o en su entorno familiar)y profesionales con una trayectoria muy ligada a la medicina y la ciencia.

Rose Joy ha subrayado las aportaciones "puntuales" que hacen cientos de personas y las donaciones "periódicas" que hacen otras, además de las contribuciones que llegan desde empresas, fundaciones, sociedades o asociaciones de pacientes.

Aunque muchas de las cantidades que percibe el CNIO a través de este programa son "simbólicas", la responsable de Filantropía del centro ha incidido en que es una de las mejores maneras de involucrar a la sociedad en esta lucha y de visibilizar la importancia de que "más investigación es igual a menos cáncer".

La directora del CNIO, María Blasco, ha subrayado la importancia y trascendencia de esta iniciativa para captar talento en este centro, que ha situado entre los diez primeros del mundo en investigación oncológica, y ha hecho ante los "amigos" que hoy han participado en el evento una radiografía de esta institución científica, de sus investigadores, de sus equipamientos o de los múltiples acuerdos y convenios que tiene con empresas, hospitales y universidades.

María Blasco ha incidido en que el CNIO "no es un hospital; aquí no hay pacientes ni camas"; pero ha situado al paciente en el eje principal de todas sus actuaciones y ha aseverado que todas las investigaciones que se realizan en el centro tratan de mejorar el diagnóstico y el tratamiento de las personas que sufren la enfermedad.

"La investigación de hoy son los tratamientos del futuro", ha defendido la directora del CNIO, y ha citado a este centro como uno de los que consigue una mayor innovación en España y el empeño permanente en tratar de que los descubrimientos se transformen con rapidez en fármacos o terapias a disposición de los pacientes.