El Gobierno niega su "debilidad" tras 8 horas de caos en el Congreso para salvar parte de su paquete fiscal
Sánchez ve posible aún un acuerdo para que se apruebe el paquete fiscal del Gobierno
"Esperpento", "debilidad", "agonía" y "pasteleo", algunos de los calificativos recogidos entre los portavoces respecto a la sesión vivida este lunes en la Comisión de Hacienda del Congreso
El Gobierno fía a su "confianza en la negociación" y la larga experiencia para lograr acuerdos, la posible salida al atolladero del paquete fiscal que quiere sacar adelante el próximo jueves y allanar así el camino a unos nuevos presupuestos.
La ministra portavoz, Pilar Alegría, ha asegurado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que nunca el "diálogo" y la "negociación" se pueden entender como una "debilidad". "Hay que tener en cuenta la realidad parlamentaria del Congreso y la hemeroteca de este Gobierno", ha aseverado, intentado justificar el caos vivido este lunes en la Comisión de Hacienda del Congreso de los Diputados con las 20 leyes publicadas en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
La Comisión de Hacienda del Congreso vivió este lunes una sesión caótica, marcada por el desconcierto, la confusión y los continuos recesos, lo que prolongó durante más de ocho horas, hasta casi la una de la noche, permitiendo al Gobierno salvar, al menos hasta el próximo jueves, parte de su paquete fiscal.
La primera en hacer visible su descontento ha sido la portavoz adjunta parlamentaria de Sumar, Aína Vidal. "Es bastante obvio que esta negociación tendría que haber empezado por los socios habituales entre ellos del Gobierno, pero también de la mayoría de investidura", ha dicho en referencia a los pactos que los socialistas cerraron con Junts y PNV. A su juicio, si la negociación se hubiera hecho en el "orden correcto" hubiera habido más probabilidades de tener "menos curvas en esta negociación".
Para Podemos, no es de recibo que el Gobierno pacte con Junts eliminar el impuesto a las energéticas y que esa misma noche pacte con ERC y Bildu recuperarlo, para que una vez conseguidos los votos de ERC y Bildu, digan que el pacto con Junts sigue vigente. "Es una tomadura de pelo", ha afirmado Javier Sánchez.
El equilibrio imposible que el Ejecutivo llevaba intentado conseguir durante varias semanas para sacar adelante sus medidas fiscales con el apoyo de grupos que exigen condiciones contrarias, como ERC y Junts per Catalunya, ya hizo que la comisión fuera aplazada en dos ocasiones antes de reunirse este lunes.
"Esto no es serio. No sabemos ni qué se va a votar, porque se mete una cosa y otra y otra", apuntaba en uno de los recesos un asesor jurídico del PP, mientras Pilar Vallugera (ERC) no disimulaba su indignación por la premura de tener que votar enmiendas transaccionales si poder estudiar su impacto.
A pesar de la aprobación de esas enmiendas transaccionales, después de votarse una a una las más de 130 presentadas, el Gobierno seguía sin tener los apoyos necesarios para la votación final de todo el texto (dictamen), lo que llevó al presidente de la comisión, el socialista Alejandro Soler, a tenerla en suspenso durante cuatro horas, hasta las 0.41. "Esto es un secuestro sin pasamontañas", llegó a decir el 'popular' Pedro Muñoz Abrines pasada la medianoche.
SÁNCHEZ VE POSIBLE AÚN EL ACUERDO
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, no da por descartado que el jueves se pueda aprobar en el Congreso el paquete fiscal que pretende impulsar su Ejecutivo ya que hasta entonces considera que hay muchas horas por delante que pueden permitir un acuerdo.
Sánchez ha mostrado su optimismo ante ese posible acuerdo en la rueda de prensa que ha ofrecido al término de la cumbre del G20 de Río de Janeiro.
El jefe del Ejecutivo rechaza que se pueda hablar de debilidad del Gobierno porque subraya que la debilidad consiste en no poder articular mayorías, y eso no le está ocurriendo a su Ejecutivo que ha aventurado, va a cumplir con su deber y va a presentar los Presupuestos.
EL IMPUESTO A LA BANCA, EL JUEVES
El giro de guión vino cuando ERC, EH Bildu y el BNG anunciaron sobre las 23.00 un acuerdo con el Gobierno que permitía a este superar la votación y sacar adelante el impuesto a la banca en el pleno del jueves, a cambio de un futuro real decreto ley que prorrogará un año el gravamen a las grandes energéticas.
A pesar de ello, tanto de la ley de tipo mínimo como de las otras medidas fiscales, prosperó, con 19 votos a favor (PSOE, Sumar, ERC, Bildu, PNV, Junts y BNG) y 17 en contra (PP y Vox).
Tras superar este trámite contra todo pronóstico, la ley de tipo mínimo y las enmiendas incorporadas del paquete fiscal deberán aprobarse en el pleno del próximo jueves, donde además resultarán imprescindibles los cuatro votos de Podemos. Sin ellos, las ocho horas de caos e incertidumbre vividas esta noche no habrán servido para nada.
La presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, ha cargado este martes contra el "pasteleo" con los "impuestos de todos los españoles" y ha calificado de "espectáculo bochornoso" lo sucedido anoche en la Comisión de Hacienda del Congreso de los Diputados
La diputada de ERC en el Congreso, Pilar Vallugera, ha celebrado que el PSOE haya acabado "cediendo" con el impuesto a las empresas energéticas, al comprometerse con su partido, EH Bildu y BNG a prorrogarlo un año. Sin embargo, la portavoz de Junts en el Congreso, Míriam Nogueras, ha subrayado que el dictamen votado en la Comisión de Hacienda del Congreso es el mismo que su grupo cerró "hace dos semanas" con el Gobierno. "Por mucha gesticulación y titulares que haya, la realidad es que ayer se votó lo que ya estaba registrado", ha señalado Nogueras, dando así por hecho que apoyará el paquete fiscal que se llevará a votación el jueves.
El PSOE ve posible diseñar un impuesto a las energéticas que contente a Junts y a Podemos. Así lo ha asegurado el portavoz del PSOE en el Congreso, Patxi López. "De aquí al jueves vamos a estar negociando hasta que suene la campana".
Mientras el PP dice que la reforma fiscal evidencia la "debilidad absoluta" de un Gobierno que está "en el alambre". El portavoz del PP en el Congreso, Miguel Tellado, sostiene que "es un Gobierno en el alambre que respira con ventilación asistida y del que Pedro Sánchez es un rehén de los partidos que le han hecho presidente del Gobierno".
Por su parte Vox ve un Gobierno "sumamente débil" y únicamente centrado "en mantenerse en el poder", y, aunque para ello "pacte con minorías separatistas contrarias a los intereses de los españoles", según aseguró Pepa Rodríguez de Millán.
{{#href}} {{ text }} {{/href}} {{^href}} {{ text }} {{/href}}
{{#href}} {{ text }} {{/href}} {{^href}} {{ text }} {{/href}}
{{/text}} {{/kicker}} {{#title}} {{#text}}{{#href}} {{ text }} {{/href}} {{^href}} {{ text }} {{/href}}
{{/text}} {{/title}}{{#href}} {{ text }} {{/href}} {{^href}} {{ text }} {{/href}}
{{#href}} {{ text }} {{/href}} {{^href}} {{ text }} {{/href}}
{{/text}} {{/kicker}} {{#title}} {{#text}}