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(Actualizado

Los agentes de la Policía de Albacete a los que se entregó Antonio Leal, el presunto asesino de Esther Escobar, han relatado que desde el principio todo apuntó al acusado y que este confesó haber matado a su pareja porque estaba “cansado” de que se acostara con otros hombres.

Así lo han manifestado ante la Audiencia Provincial de Madrid, que ha arrancado este martes la prueba testifical de la vista oral con los agentes que intervinieron en su detención y los policías que se entrevistaron con los testigos directos del crimen cometido en febrero de 2020 y con la familia de la víctima.

Uno de los agentes que se desplazó al lugar del crimen ha detallado que la Policía Científica recogió vestigios en el escenario del asesinado, tomando muestras del charco de sangre que había bajo la víctima y recogiendo una vaina utilizada en el disparo que mató a la víctima.

En su declaración, el presunto asesino se retractó el lunes de su confesión y manifestó que la mujer tenía deudas con el club de alterne en el que ejercía la prostitución, indicando que huyó por temor a que le mataran también a él.

Dos testigos directos del crimen describieron físicamente al asesino como una persona baja, calva, con barba y con complexión fuerte, datos que encajan con la fisonomía del acusado.

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El crimen de Esther, de 40 años y madre de 4 hijos, se produjo a las siete de la tarde del 26 de febrero de 2020 cuando la mujer caminaba por el número 6 de la calle Virgen de los Reyes, en Ciudad Lineal. El asesino se le acercó y le disparó en la sien a bocajarro. Tras el disparo, huyó del lugar.

Los agentes iban patrullando cuando Antonio les paró haciendo aspavientos con los brazos y les comentó que había matado a su pareja, comprobando que en Madrid había una orden para su localización. Los policías comprobaron que tenía un tatuaje en el interior de la mano en el que ponía "Esther".