El jefe de la lucha antiyihadista de la Guardia Civil ratifica que De Aldama y Koldo eran colaboradores
Asegura que Koldo le confesó que sabía que le estaban investigando y que fue Koldo García quien introdujo a Aldama como colaborador de la Guardia Civil
El coronel Francisco José Vázquez, quien está al frente de la unidad contra el terrorismo yihadista de la Guardia Civil, conocida como UCE-2, ha señalado este lunes ante el juez que instruye el 'caso Koldo' en la Audiencia Nacional, en su declaración como testigo, que tanto el presunto conseguidor de la trama, Víctor de Aldama, como el exasesor ministerial Koldo García eran colaboradores de su unidad.
Así lo confirman fuentes jurídicas presentes en la declaración del coronel, que añaden que también ha apuntado que cuando condecoró en 2022 a De Aldama fue a propuesta del comandante Rubén Villaba --investigado en la causa--, y que él estuvo de acuerdo.
Además, según estas fuentes, el coronel ha indicado que Koldo García, quien ha asegurado que colaboró durante muchos años en la lucha contra el terrorismo de ETA, en un momento dado le comentó que sabía que le seguían agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) y que se ponía a disposición de la Guardia Civil.
Ha apuntado que Koldo llegó a ofrecerle hasta las llaves de su casa como gesto de colaboración.
El coronel Vázquez, sin embargo, se ha acogido a la ley de secretos oficiales cuando ha sido preguntado sobre en qué modo colaboraba De Aldama con la unidad. También se ha escudado en la citada norma cuando se le ha interrogado sobre el uso de fondos reservados que manejaban.
En su declaración, Vázquez ha explicado que recibió una notificación --al ser De Aldama confidente de la unidad-- cuando la UCO comenzó a investigar al presunto conseguidor de la trama. Fue entonces, apuntan las fuentes consultadas, cuando el coronel comenzó a sospechar.
UNA TEATRALIZACIÓN
Vázquez habría asegurado que no conocía que se estuvieran produciendo pagos por parte de De Aldama para que Villalba le garantizase la seguridad en sus comunicaciones.
El coronel ha sido preguntado por algunas de las grabaciones reflejadas en el informe de la UCO que se centra en Villalba, y en las que se habló de esos pagos. Según Vázquez, esas charlas se teatralizaron junto al resto de agentes de la unidad --cada uno de ellos jugaría un rol-- con el objetivo de que Villalba confesase.
Este mismo lunes también han declarado tres agentes de UCE-2 --subordinados de Villalba y que participaron en esas conversaciones-- que han confirmado que realizaron ingresos de dinero a cuentas del propio comandante a petición del investigado. Según la UCO, era Villalba el que explicaba a qué cuentas debían ingresar y el concepto de los pagos.
Las fuentes jurídicas han señalado que los tres testigos han enmarcado en la profesionalidad el hecho de que realizasen esos ingresos, amparándose en que seguían órdenes.
DE ALDAMA, EL "NEXO CORRUPTOR"
Estas citaciones, a las que hay que sumar la de otros tres agentes de la UCE-2 que comparecerán este martes, llegan a raíz del informe de la UCO que se centraba en la figura de Villaba y su vinculación con De Aldama, al que la Guardia Civil describía como el "nexo corruptor" que conectaba "de manera premeditada y con intenciones claramente espurias" la administración estatal "con las estructuras societarias que operan bajo su control y dirección".
El informe de la UCO incluía "un conjunto robusto de elementos que evidencian el poder de De Aldama", dado que "logra infiltrar su presunta organización criminal dentro de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, valiéndose de la colaboración activa de Rubén" --Villalba--, el agente de la Guardia Civil destinado en Venezuela y que fue detenido en el marco del 'caso Koldo'.
Resaltaban los agentes que Villalba habría recibido "una contraprestación económica --que podría ascender a más de 88.000 euros entre 2021 y 2023-- cuya finalidad primordial era asegurar la protección y continuidad de la presunta organización criminal" mediante dos ejes.
Uno sería garantizando la seguridad interna u orgánica de los miembros, "que comprende la salvaguarda de sus comunicaciones y su seguridad personal", y otro sería garantizando la seguridad externa "protegiendo los actos de corrupción propios de la operativa delictiva".
En el informe se recoge una conversación de Villalba con quien era su jefe --supuestamente Vázquez-- en la que éste trata de cerciorarse de que en los asuntos en los que han ayudado en materia de seguridad "no es para ninguna actividad criminal por parte de ellos". Villalba le explicó que no, que "es un tema de negocios".
PAGOS RECURRENTES DE 2.000 EUROS
En concreto, la UCO subrayaba que Villalba habría recibidos pagos tanto de De Aldama como de Koldo García, el exasesor del exministro José Luis Ábalos. Apuntaba que los pagos "en efectivo" arrancan en 2021 --la primera referencia que tiene la Benemérita es de mayo-- y se extenderían hasta 2023, y añadía que ya en otro de sus atestados hablaban de pagos recurrentes de 2.000 euros.
Según la investigación de los agentes, esos pagos por parte de la presunta trama al guardia civil investigado coinciden en el tiempo con ingresos de efectivo en cuentas a su nombre. Esos ingresos, sostenía el informe, eran abonados en ocasiones por agentes subordinados del propio Villalba que "daba instrucciones" de a qué cuentas debían ingresar y el concepto.
Además, la UCO aseveraba que de las grabaciones a Villalba se pudo saber que recibió pagos de De Aldama y de Koldo García, y que de hecho, en las mismas reconoce haber recibido entre 10.000 y 12.000 euros en efectivo provenientes del presunto conseguidor y vinculado exclusivamente a esa dotación de una línea segura de comunicaciones.
Sobre los pagos de Koldo García, la UCO explicaba que no tienen cifra exacta de lo que abonó por líneas seguras pero sí saben que le dio 4.000 euros en efectivo en 'La Chalana' en septiembre u octubre de 2023.
En ese apartado de las comunicaciones, la UCO analizaba documentos y conversaciones y destacaba que Villalba asignó terminales móviles tanto a De Aldama como a Koldo García. Según sostuvo el propio guardia civil, ambos "habrían entregado dinero en efectivo con la contrapartida de obtener teléfonos en B".
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