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(Actualizado

Los acosadores de la niña de Canet de Mar, cuya familia pidió el 25% de la enseñanzan en castellano intentan esquivar a la justicia alegando que son "castellanoparlantes".

La apertura del sumario por la presión que sufrió la menor por solicitar la enseñanza en español revela que la niña sufrió humillaciones y un acoso continuado para lograr que ella y su familia abandonaran el pueblo.

En el auto el juez instructor deja claro que se hizo un llamamiento para aislar y humillar a la menor, para que fuera apartada de su clase.

La Fiscalía investiga como delito de odio el acoso contra la enfermera que criticó los requisitos de catalán

Relata también los insultos a sus familias en las redes sociales calificándoles de "colonos no integrados" o "terroristas" y señalándoles con nombre y apellidos para que se marcharan de Canet.

El abogado considera que estas expresiones pueden ser constitutivas de un delito de odio.