Continúan las obras de remodelación de la línea C-4 de Cercanías a su paso por Getafe.
Más de 200 personas trabajan en turnos de 8 horas, las de 24 horas del día para que el 1 de septiembre pueda prestar este tramo de nuevo servicio.
Son cerca de 3 kilómetros y medio en los que se está cambiando tanto las vías como la catenaria para evitar las vibraciones que muchos de los vecinos vienen padeciendo desde que el soterramiento de las vías del tren a su paso por Getafe fuera inaugurado hace dos décadas.
La clave para evitar las vibraciones según explican los técnicos está en la colocación de unos tacos de goma.
Unos trabajos con los que se acabaran las vibraciones que hasta ahora se producían cuando circulaban los trenes de Cercanías, en los que Adif invierte 10 millones de euros.
Hasta que concluyan las obras de remodelación, el próximo 31 de agosto, se mantiene el servicio sustitutivo de autobuses puesto en marcha por el Consorcio Regional de Transportes.