España invierte en fusión nuclear y construirá un centro que validará los futuros reactores

Estados Unidos ha logrado en primicia una ignición por fusión, que cambiará el futuro de la energía limpia. Por primera vez, los investigadores en este campo producen más energía a partir de la fusión de la que se utilizó para impulsarla.

Tras este anuncio sobre la fusión nuclear, España está muy presente en la investigación sobre esta nueva fuente de energía dentro de la Unión Europea. Nuestro país es el tercer suministrador europeo en el Reactor Termonuclear Experimental Internacional.

"El ITER es un proyecto inmenso. Sólo la máquina pesa 23 toneladas. Está necesitando entre 15 y 20 años de construcción", indica Joaquín Sánchez, coordinador científico del CIEMAT. Este ITER podría estar operativo en 2028.

Mediante la fusión nuclear, se podría generar toda la energía que consume una familia durante 80 años con tan solo los átomos contenidos en un vaso.

Uno de los grandes retos es que no se puede hacer fusión en un laboratorio, pues "la máquina de fusión magnética más pequeña que pueda ser viable" mide más de 1.000m2.

España va a construir en Granada un centro que validará los futuros reactores, el IFMIF-DONES, que será la clave para "robar los materiales" de estos reactores.

Organizaciones ecologistas como Greenpeace, se muestran escépticas ante una energía que se producirá en décadas y siguen apostando por la realidad de las renovables.

Los defensores de la fusión recuerdan que con los átomos contenidos en una cuchara se puede generar la misma energía que se obtiene quemar todo el carbón que cabe en un estadio.