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El Rey Felipe VI ha presidido el arranque de los actos conmemorativos del 425 aniversario del Colegio de la Abogacía de Madrid (ICAM) en una ceremonia que ha arrancado con la jura de los nuevos letrados madrileños que se incorporan a la Abogacía y en la que ha ensalzado el papel de los abogados en la búsqueda de la concordia.

Al acto han asistido altas autoridades como la ministra de Justicia, Pilar Llop; los presidentes del Tribunal Supremo y el Tribunal Constitucional, Carlos Lesmes y Pedro González-Trevijano; los expresidentes del Gobierno Felipe González y José María Aznar; el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida; la delegada de Gobierno en Madrid, Mercedes González; y el consejero de Presidencia, Justicia e Interior, Enrique López, entre otros.

Tras la jura de los nuevos abogados, su Majestad el Rey ha recibido a manos del decano del ICAM, José María Alonso, un reconocimiento especial por sus 25 años como Colegiado de Honor del ICAM.

Tras recibir la distinción, Felipe VI ha celebrado poder unirse a la celebración del aniversario del Colegio, una "ocasión que merece todo el realce" al manifestar que además de honrar y admirar la historia de la Corporación, le alegra ser "testigo de su continuidad" ante la incorporación de los nuevos letrados.

El Rey ha querido recordar como hace 25 años el exdecano del ICAM Luis M. Mingarro le entregó la Medalla de Oro y el Diploma de Colegiado de Honor, coincidiendo con el VI Centenario del ICAM.

Tras ello, ha subrayado que a lo largo de los años los abogados se han convertido en actores principales de la sociedad civil, "escribiendo muchas de las mejores páginas de la historia de España". "Las más notables en lo que respecta a avances del Estado de Derecho. Vuestro trabajado ha sido, es y será, sumamente valioso", ha recalcado.

En la misma línea, ha destacado que con su experiencia en el Derecho aplicado, los abogados colaboran con la labor del poder legislativo ya que desde "esa experiencia se obtienen indudables lecciones sobre lo que resulta necesario legislar en función de la realidad social de cada momento".

De igual modo ha recordado que la Abogacía también ha estado "muy presente en el poder ejecutivo a lo largo de la historia a través de políticos, ministros, presidentes de Gobierno que fueron colegiados de Madrid", lo que denota "la importancia de la formación jurídica en el ejercicio de gobierno".

Felipe VI ha incidido en que la Abogacía no está exenta de los cambios del entorno, por lo que ha dicho que "la práctica jurídica aborda nuevos retos tanto en la elaboración normativa como en la práctica para el tráfico jurídico y económico".

También ha querido hacer una mención especial a los abogados del Turno de Oficio, "quienes velan por la correcta aplicación del Derecho de defensa de los más desfavorecidos o vulnerables". "Estos profesionales hacen que e sistema funcione con niveles de calidad elevados en la prestación de servicios", ha reseñado.

El Rey ha querido felicitar a los nuevos colegiados y al Colegio por el aniversario, que vive como propio subrayando que "no hay futuro sin memoria" y afirmando que hay que congratularse de forma colectiva por esta efeméride, que "certeramente recuerda el fecundo paso por la Historia de una profesión tan noble como necesaria siempre en la búsqueda de la concordia en la sociedad".

Por la tarde, también en el Teatro Real, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís intervendrán en la entrega de diplomas a los abogados con 25, 50 y 60 años de profesión.

DEFENSA DEL PRINCIPIO DE LA LEGALIDAD

En su intervención, el decano José María Alonso ha agradecido en primer lugar la disposición de Felipe VI para presidir un acto tan importante para el Colegio como es la incorporación de los nuevos abogados, coincidiendo con nuestro 425 Aniversario.

De igual modo, ha mostrado su gratitud a su Majestad por ser "el primer defensor del Estado de Derecho y del respeto a las normas que conforman nuestro Ordenamiento Jurídico", empezando por "la Constitución; defensa del Estado de Derecho y cumplimiento de las Leyes que constituye la razón de ser última de nuestra profesión y de nuestro ejercicio como abogados y abogadas". "Su Majestad puede estar seguro de que la Abogacía Madrileña, a la que me honro hoy en representar, estará siempre a su lado en la defensa del principio de legalidad", ha subrayado.

El decano ha destacado la importancia de este primer acto, ya que da comienzo a los actos que se celebrarán esta semana para conmemorar el 425 aniversario del Colegio, "fundado bajo la denominación de "Congregación de Abogados de la Corte" por el Rey Felipe II en el año 1596, dos años antes de su fallecimiento. "De esta manera, se establece una línea sin solución de continuidad entre las dos Casas Reales que han estado durante cinco siglos al frente de los destinos de España: la Casa de Austria, en nuestro nacimiento y la Casa de Borbón, en nuestro 425 cumpleaños", ha señalado.

Tras ello, ha señalado que está "convencido" de que el reinado de Su Majestad será recordado en "el futuro con el mismo respeto y admiración con que hoy lo es el de ese gran Rey que fue Felipe II".

GRANDES FIGURAS A LA HISTORIA

José María Alonso ha subrayado que "a lo largo de estos cinco siglos de existencia, el Colegio ha proporcionado grandes figuras a la historia de nuestro país; porque la historia del ICAM es la historia de España".

"Mujeres abogadas que tan difícil lo han tenido para el ejercicio de la profesión, pero que hoy en día, de los más de 76.000 colegiados y colegiadas que integramos el ICAM, cerca de la mitad son abogadas y el porcentaje sigue creciendo. Nuestro compromiso con la igualdad es absoluto e irrenunciable", ha recalcado.

Además, ha puesto el valor el papel de la Abogacía al estar "plenamente comprometida con la defensa del derecho de defensa, con la lucha por las libertades y los valores democráticos".

Seguidamente, ha recordado como los abogados madrileños tuvieron durante la dictadura que defender a los ciudadanos ante tribunales políticos, cuya principal manifestación fue el Tribunal de Orden Público, sufriendo, incluso, penas de privación de libertad, simplemente por defender los derechos fundamentales de los ciudadanos, son un ejemplo que a todos nos debe inspirar".

También ha puesto en valor la labor de los más de 6000 abogados y abogadas que dedican la mayor parte de su actividad a prestar asistencia jurídica gratuita y al turno de oficio. "Su labor, no suficientemente reconocida por la Sociedad y por los Poderes Públicos, ha sido especialmente relevante durante la pandemia, resultando muchos de ellos contagiados por el Covid, llegando algunos a perder incluso la vida, al asistir a los ciudadanos en comisarías y cuarteles de la Guardia Civil y Juzgados, pese a no contar con las más elementales medidas de protección. Mi reconocimiento y gratitud a todos ellos", ha dicho.

En este punto, ha insistido en que la Abogacía es esencial para el normal funcionamiento de la sociedad, ya que sin abogados no habría caso y se viviría sin seguridad jurídica.

El decano ha reclamado que los abogados deben "participar en el gobierno y en la organización de la Administración de Justicia, respetando siempre la función jurisdiccional que, naturalmente, corresponde con carácter exclusivo a los Jueces, a los que desde aquí les expresamos el máximo respeto y apoyo". "Los abogados debemos participar directamente en la elaboración normativa, y no simplemente ser consultados marginalmente y a última hora. Esto es sencillamente evidente", ha dicho.