Garamendi defiende que un ‘cupo’ catalán deberían votarlo todos los españoles

El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, defendió este martes que si se aprueba un tipo de financiación ‘singular’ para Cataluña que afecta al resto de comunidades deberían poder votarlo todos los españoles, mientras que afeó que en un momento en el que se habla de reforzar la unidad europea, “estamos rompiendo el país en 17 trozos”.

Así se expresó Garamendi en unas jornadas de la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES), en las que dijo que es “clave” la “solidaridad” interterritorial, la “igualdad” y la “unidad de España”.

Pase lo que pase, hay dos formas de que algo sea constitucional. Una que te digan qué es, y otra que es lo que hay que hacer, que es que los españoles votemos. Yo creo que esto exige que los españoles votemos lo que se nos vaya a poner encima de la mesa. Tenemos absolutamente todo el derecho a hacerlo”, exigió Garamendi.

Además, señaló la contradicción existente entre que se hable de “cómo tenemos que tener una Europa unida, “ y, sin embargo, “aquí estamos rompiendo el país en 17 trozos”, lo que advirtió que “es malísimo”.Frente a este contexto, el presidente de la CEOE subrayó que ellos apoyarían más unidad de acción en el país, mediante el respaldo a la “famosa autonomía 18 con respecto a lo que sería una unidad de acción en ciertos temas”, porque “uno de los grandes dramas de España es la ruptura de la unidad de mercado como consecuencia también de todo lo que es la burocracia, normas, etc”.

Asimismo, sostuvo que si hay comunidades que tienen más autonomía, Madrid también puede disponer de ella para desarrollar sus políticas económicas, máxime cuando es “la que más paga”.

LIBERTAD DE EXPRESIÓN

Preguntado por el propósito del Gobierno de aumentar la regulación de los medios en aras de luchar contra los “bulos”, Garamendi afirmó que cree “profundamente en la libertad”, pues es la “base” de la democracia”.

Igualmente, insinuó que es contradictorio que se avance en la dirección que quiere el Ejecutivo mientras se quiere legalizar que “al Rey se le puede insultar, quemar y hacer lo que se quiera, o a la Iglesia o a los sentimientos religiosos”.

“Parece que se pueden hacer unas cosas y otras no”, afeó Garamendi, para añadir a posteriori que los que son líderes sociales “nos hemos comido muchas” críticas “en esa libertad de editoriales o de noticias que te gustan o no te gustan”.

“Yo creo que es parte de la democracia, es parte del respeto a cada una de las líneas editoriales que pueda haber. Lo que no me vale es que solo sea esta es la buena y esta es la mala”, aseveró el presidente de los empresarios españoles, quien concluyó: “A mí todo lo que sea un recorte de las libertades, y especialmente de la libertad de expresión, me parece un recorte de la democracia”.