El Gobierno ha rebajado la estimación de crecimiento del PIB hasta el 2,6% en 2018 y el 2,3% en 2019, lo que supone una rebaja de una décima con respeto a las previsiones anteriores en ambos casos. Así lo explicó la ministra de Economía, Nadia Calviño, al término del Consejo de Ministros que abordó el plan presupuestario remitido por el Reino de España a la Comisión Europea, donde destacó que se trata de previsiones "prudentes y realistas".
Además, apuntó que la rebaja con respecto a las anteriores previsiones se produce por una peor aportación del sector exterior, que pasa a ser negativa en lugar de positiva en 2018. Por su parte, la demanda interna crecerá un 2,7% este año y un 2,3% el siguiente.
En cuanto al desempleo, las nuevas previsiones contemplan concluir 2018 con una tasa del 15,5% y que este indicador se reduzca hasta el 13,8% en 2019.
Por su parte, el consumo final estimado por el Ejecutivo crecerá un 2,2% en 2018 y un 1,8% en 2019, mientras que la formación bruta de capital fijo lo hará un 5,3% este año y un 4,4% el siguiente.
Asimismo, el Gobierno prevé que las exportaciones se incrementen un 3,2% en 2018 y un 3,4% en 2019, incrementos que en las importaciones serán del 4% y el 3,8%.
Por otro lado, el PIB nominal previsto por el Ejecutivo contempla un crecimiento del 3,9% en 2018 y del 4,1% en 2019, con deflactores del 1,3% este año y del 1,8% en 2019.
EL BORRADOR SE ENVIARÁ A BRUSELAS CON UN DÉFICIT DEL 1,8%
El Gobierno ha elaborado el plan presupuestario, que este mismo lunes enviará a Bruselas, con un déficit público del 1,8% del PIB, a pesar de que el PP y Ciudadanos han bloqueado en el Congreso la tramitación parlamentaria de la eliminación del veto del Senado a la nueva senda presupuestaria.
Al término de la reunión del Consejo de Ministros, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha indicado que si no se aprueban los nuevos Presupuestos para el año que viene, el déficit público se situará en el 2,2% del PIB por la propia inercia económica, por tanto, cuatro décimas por encima del 1,8% planteado por el Gobierno.
De esta forma, el Gobierno ha mantenido la senda de estabilidad presupuestaria planteada y rechazada en julio por el Congreso, que contempla unos objetivos de déficit del 2,7% este año, del 1,8% en 2019, el 1,1% en 2020 y cuatro décimas de PIB en 2020.
Montero ha explicado que el Gobierno seguirá trabajando para hacer posibles los cambios normativos que permitan ver la luz a la nueva senda, y ha defendido que con ella se corrige el incumplimiento "flagrante" de los objetivos en los últimos años.
La senda de déficit planteada por el Gobierno de Pedro Sánchez, rechazada por el Congreso a finales de julio, plantea un déficit del 2,7% este año, cinco décimas más que la senda del Ejecutivo de Rajoy, un 1,8% para 2019 (cinco décimas más), un 1,1% para 2020 (ocho décimas más) y cuatro décimas en 2021, frente al superávit que auguraba el anterior Gobierno.
HACIENDA CIFRA EN 5.678 MILLONES EL IMPACTO DE LAS MEDIDAS FISCALES PACTADAS
María Jesús Montero, ha cifrado en 5.678 millones de euros el impacto global de las medidas fiscales acordadas entre el Gobierno y Unidos Podemos, de los que 4.489 millones corresponden al impacto en el proyecto Presupuestario del próximo año.
Montero ha detallado el impacto de las medidas, encabezadas por la limitación de exenciones y la fijación de una tributación mínima del impuesto de sociedades para grandes empresas, que tendrá un impacto de 1.776 millones de euros.
La creación de un impuesto sobre servicios digitales tendrá un impacto de 1.200 millones de euros y el impuesto sobre transacciones financieras, de 850 millones.
Las medidas de fiscalidad verde tendrán un impacto de 670 millones; el incremento del IRFP para rentas muy altas, 326 millones; la subida del impuesto de patrimonio, 339 millones; la limitación de los pagos en efectivo para profesionales, 218 millones; la bajada del umbral para incorporarse a la lista de morosos, 110 millones, y el resto de medidas para luchar contra el fraude, 500 millones.
Por contra, la rebaja del tipo del impuesto de sociedades para pymes restará 260 millones; la rebaja del IVA para servicios veterinarios, 35 millones, y las medidas de fiscalidad de género y desigualdad, 18 millones.