Una mirada al legado de Gregorio Ordóñez en una exposición que llega al Palacio de Cibeles

Lo asesinaron el 23 de enero de 1995. Junto a él, encontraron un maletín, su agenda o un cómic que quería regalar a su hijo. Todo, 300 objetos personales, forman parte de ‘Gregorio Ordoñez. La vida posible’, una exposición que permanecerá abierta al público en Madrid hasta el 10 de enero.

Ha sido comisariada por la periodista María Jiménez Ramos en colaboración con Ana Iríbar, directora del proyecto, y cuenta con el diseño museográfico de Enrique Bonet y los contenidos audiovisuales dirigidos por Iñaki Arteta.

Un recorrido por la figura del político vasco. Un ejemplo, dice su viuda Ana Iríbar, de hombre libre: “Cuando en Euskadi se habla de normalización, Gregorio la ejercía con absoluta normalidad porque para él lo normal era ser libre para pensar”.

Gregorio Ordóñez estaba a punto de conseguir ser alcalde San Sebastián cuando la banda terrorista acabó con su vida con un tiro en la nuca. Destaca su figura el consejero de Víctimas del Terrorismo, Enrique López: “Tenía 36 años y un techo político que nunca sabremos cuál pudo haber sido”.

Su asesinato marcó un antes y un después: un cambio de estrategia de ETA, que hasta ese momento asesinaba, sobre todo, a policías y guardias civiles. Lo cuentan las imágenes, documentos inéditos y tres audiovisuales que completan la exposición.

Uno de ellos, de Iñaki Arteta, en que se puede ver a la izquierda la vida cotidiana en San Sebastián y a la derecha los asesinatos de ETA. Según el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, “un ejemplo de lo que pasa en España durante los años de plomo”. Por eso, anima el alcalde a visitar esta exposición: “El mejor homenaje que podemos hacer a las víctimas y a los que cayeron bajo las balas no de la lucha armada, sino de una banda sanguinaria e irracional es venir a esta exposición y saber lo que pasó”.

Una muestra que se presentó el pasado mes de enero en el Palacio de Miramar de San Sebastián, donde recibió cerca de 6.000 visitantes, y que ahora puede verse hasta el 10 de enero en CentroCentro, en el Palacio de Cibeles.