El Gobierno ha concedido el indulto a la expresidenta de la asociación Infancia Libre, María Sevilla, aunque no se ha arrepentido de secuestrar a su hijo. El Ejecutivo le otorga un perdón parcial para que salga de prisión.
Le devuelve la patria potestad pese a que ha admitido públicamente que volvería a delinquir y ninguna de sus denuncias contra el padre prosperó.
Sevilla fue condenada a dos años y cuatro meses de cárcel por un delito de sustracción de menores. Durante dos años retuvo a su hijo ocultándolo del padre, Rafael Marcos.
Fue detenida en Cuenca, el niño estaba sin escolarizar, ni vacunado. Ella siempre dijo que lo hacía para protegerlo de los abusos sexuales que atribuía al padre.
Unas acusaciones que Marcos siempre ha negado. Todas las denuncias fueron desestimadas por los jueces.