La Casa Ronald McDonald en el Hospital Niño Jesús, "un hogar fuera del hogar"

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha visitado este jueves la Casa Ronald McDonald de Madrid en el recinto del Hospital público Universitario Infantil Niño Jesús, que acoge temporalmente a familias de niños con ingreso de larga estancia en hospitales de la región y la única de esta categoría que existe en España.

Un dispositivo que desde que abrió sus puertas en 2015 ha atendido a más de 1.563 familias de todos los rincones de España y que, según ha resaltado Ayuso, es "un ejemplo de lo que lejos que puede llegar la colaboración público privada" y, sobre todo, "de acogida, de solidaridad y del carácter universal que tiene la sanidad madrileña".

Este centro acoge tanto a familias como a niños que reciben tratamiento en centros públicos de referencia madrileños, como La Paz, Gregorio Marañón y 12 de Octubre, así como a los que se les aplica protonterapia.

"Estamos hablando de niños y de familias que están aquejados de procesos muy complejos. Niños que han de pasar aquí muchos meses, incluso más de un año", ha recordado Ayuso, y además alejados de su día a día, lo que afecta a su salud emocional.

En el citado centro residen actualmente 29 familias, con nueve a la espera de tener una plaza. "Los niños siguen en la infancia, siguen en su casa, jugando entre ellos, relacionándose, haciendo amigos y, mientras tanto, las familias tienen un apoyo, una ayuda emocional extraordinaria de la mano de otras familias que pasan por lo mismo y que, por tanto, se entienden a la perfección", ha subrayado la presidenta.

"Es la forma en la que tenemos que afrontar como nación todos lo retos: sin regionalismos, sin nacionalismos, sin egoísmos", ha recalcado Ayuso, quien ha recalcado que los niños son "un reto de todos" para defender que "allá donde haya una persona en cualquier rincón de España que necesite algo tiene que saber que para eso también somos capital".

"Desde aquí, desde Madrid, no vamos a dejar a nadie atrás y mucho menos a quienes más lo necesitan y especialmente si son niños", ha recalcado. En este sentido, la presidenta madrileña ha puesto en valor el carácter solidario de la región, cuyos recursos han atendido a más de 160.000 pacientes de otras comunidades autónomas.

Igualmente, Ayuso ha destacado que también la excelencia de la Sanidad madrileña, con 89 centros, servicios y unidades de referencia nacional, 32 de ellos pediátricos, que solo el año pasado atendieron a más de 36.000 niños españoles para el tratamiento de los procesos más complejos.

"Nunca antes en la Comunidad de Madrid se había invertido tanto en sanidad pública ni se había hecho tantos esfuerzos para mejorarla y, por supuesto, no nos vamos a quedar aquí ni nunca conformarnos. Es una Sanidad de la que nos sentimos muy orgullosos, pero que tiene que evolucionar y avanzar siempre", ha incidido.

LA CASA RONALD MCDONALD

La jefa del Ejecutivo autonómico ha podido conocer los detalles de este proyecto altruista en una reunión mantenida con los responsables de la iniciativa y algunos usuarios beneficiarios, así como la actividad de la propia casa, gestionada por la Fundación Infantil Ronald McDonald.

Desde su inauguración, hace 8 años, ha acogido a 1.563 familias, que en la mayoría de los casos corresponden a enfermos atendidos en las áreas de Oncología, Neurología, Traumatología o Psiquiatría del Niño Jesús.

El inmueble está dividido en tres plantas, con una superficie construida de 3.000 metros cuadrados. Dispone de 30 habitaciones, seis cocinas, dos salas de estar independientes, sala de juegos y zonas de estudio, entre otras dependencias.

El objetivo de la Casa Ronald McDonald, que también cuenta con recursos de este tipo en otros lugares de España, como Barcelona, Valencia o Sevilla, es que los pacientes pediátricos sientan que tienen un hogar cuando se ven obligados a estar fuera del suyo para recibir atención sanitaria.

La compañía de sus parientes desempeña un papel importante en su recuperación, especialmente cuando hay que trasladarse a otra ciudad. Además, para las familias supone un alivio económico, al ahorrarse el alto coste que puede suponer este tipo desplazamientos, especialmente durante periodos prolongados.