Vídeo: TELEMADRID | Foto:Telemadrid
(Actualizado

España vigila de cerca la reduflación, una práctica comercial que consiste en vender menos cantidad de un producto, pero al mismo precio.

Los consumidores llevan meses detectándola a la hora de hacer la compra que acaba menguando sin darnos cuenta. En especial en la pasta, las varitas de merluza, las latas de atún, los envases de margarina o el gel de baño.

Cambian los hábitos de los consumidores para hacer frente a la inflación

La OCU ya la ha denunciado ante Competencia por "engañosa y poco transparente".

Para los fabricantes es una estrategia comercial que ayuda a combatir la pérdida de volumen en los supermercados.

Algunos de los productos de marcas conocidas que más recurren a la reduflación

Francia la ha prohibido. A partir de noviembre, todos los productos que cambien su cantidad tendrán que señalarlo en sus etiquetas.

Algunas cadenas ya lo hacen en una treintena de referencias que no recortan precios pero sí cantidad. Una estrategia que se ve con atención desde España.