La Sociedad Gitana Española denuncia incidentes racistas tras la muerte de un joven en Íllora

La noche ha traído coches volcados y ardiendo, piedras contra al menos cinco casas y mucha tensión en Íllora, Granada. Un malestar que se disparó tras la muerte de un joven del pueblo presuntamente a manos de otro de un clan gitano.

La detención del presunto asesino no ha servido para disipar la tensión en la localidad granadina y aseguran que su familia ha tenido que salir de la ciudad. Por eso, la Sociedad Gitana Española ha acudido al Defensor del Pueblo. Quieren que se abra una investigación sobre unos hechos que consideran xenófobos y racistas.

Esa ha sido la respuesta del colectivo gitano ante los actos violentos hacia los familiares del supuesto autor del crimen de Juan. Piden a esta institución una integración real.

Xinaí Jiménez, presidente de la Sociedad Gitana Española ha tenido duras palabras para los alcaldes de Íllora y Peal del Becerro, afirmando que “no ejercen lo que han jurado de defender los derechos constitucionales de todos los ciudadanos de su pueblo" añadía que “Lo que deben hacer es imputarlo y lo segundo, que dimita”.

Un claro mensaje dirigido a los alcaldes de los dos municipios en los que se han producido incidentes similares y que desde la asociación consideran que no son hechos aislados. Por ambos sucesos, en Jaén y Granada, han remitido una denuncia a la fiscalía para investigar a sus alcaldes.

“¿Qué culpa tiene mi familia de los actos ilícitos que yo pueda cometer? ¿Por qué tienen que aprovechar eso para echar a las familias gitanas? ¿Por qué tienen que quemarles las casas?” se ha preguntado Antonio Hernández, Presidente de la Asociación Hermandad de Andalucía.

Mientras, las declaraciones respecto a los hechos ocurridos durante las fiestas patronales de Íllora son contradictorias. Algunos testigos hablan de amenazas de muerte a la vez que aseguran que la víctima fue golpeada antes y después de caer al suelo. Nada que ver con la declaración del hermano del detenido.

La investigación deberá determinar si la muerte fue por la paliza de los supuestos agresores o al golpear en la caída contra el bordillo para lo cual, la autopsia será determinante.