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El actual episodio de sequía en Cataluña se puede calificar de “excepcional" ha informado el Servicio Meteorológico. La previsión de lluvias para el resto del verano es poco halagüeña y en la región miran con preocupación al cielo.

Por eso el gobierno se prepara para una sequía que puede durar meses y en un centenar de municipios ya hay restricciones al consumo de agua.

La sequía fuerza a autonomías y municipios a restringir el consumo de agua

Uno de los pueblos más afectados es Bonastre, en la provincia de Tarragona. Ya en junio el ayuntamiento de esta localidad impuso limitaciones en el suministro. Ahora se restringe el consumo de agua dentro de las casas.

Esta restricción se produce en distintos momentos del día en función de cómo se encuentren las reservas. Los vecinos de Bonastre deben acudir a una cisterna que se ha instalado en la plaza y llenar todas las garrafas que tengan para poder realizar tareas cotidianas como, por ejemplo, lavar los platos o ducharse.

Adiós a las duchas de la playa: la alerta por sequía lleva a restringir el consumo de agua en Andalucía

Los más damnificados son los propietarios de negocios que ven limitada su actividad. Por ejemplo, estas limitaciones impiden a los hosteleros ofrecer algo tan básico para su negocio como un café.