Vídeo: Redacción | Foto:Telemadrid
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Las cámaras termográficas reflejan estos días las elevadísimas temperaturas que pueden alcanzar algunas superficies en las calles de Madrid.

Las fachadas de algunos edificios llegan a soportar temperaturas superiores a los 56 grados y un coche oscuro estacionado al sol puede alcanzar más de 60 grados. Con la ayuda de cámaras termográficas, se puede saber con exactitud qué temperatura tienen elementos urbanísticos de uso frecuente como el asfalto o un banco.

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Los expertos aconsejan sobre sencillas medidas que nos ayuden a soportar mejor las elevadas temperaturas que toda la península sufre en estos primeros días del mes de julio.

De este modo, es aconsejable utilizar ropas de tejidos claros, que reflejan la luz y absorben menos calor que las oscuras, y evitar en la medida de lo posible las zonas más soleadas.

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La temperatura entre una zona situada al sol y otra a la sombra puede sufrir una variación de hasta 17 grados.