Los trenes de Cantabria y Asturias le cuestan el puesto al presidente de Renfe y la secretaria de Estado de Transportes

La renovación de trenes que no caben en los túneles del norte de España se ha cobrado dos nuevos cargos. Este lunes el propio presidente de Renfe ha presentado su dimisión y la secretaria de Estado de Transportes ha sido cesada.

Isaías Táboas e Isabel Pardo de Vera son las últimas salidas provocadas por la polémica de los nuevos trenes de ancho métrico contratados para Cantabria y Asturias.

Raül Blanco será el nuevo presidente de Renfe y David Lucas, el secretario de Estado de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, cuyos cargos serán aprobados el martes por el Consejo de Ministros, según han confirmado a Efe fuentes de ese ministerio.

Blanco fue secretario general de Industria y PYME y recientemente fue designado al frente de la Fundación de la Escuela de Organización Industrial. Lucas era hasta ahora secretario general de Agenda Urbana y Vivienda

El 6 de febrero fueron cesados el gerente de Área de Gestión de Material de Renfe Viajeros y al titular de la jefatura de Inspección y Tecnología de vía de Adif.

Responsabilidades asumidas

La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, ha dado por asumidas todas las responsabilidades por el error de los trenes de Cantabria y Asturias con las dimisiones de Táboas y Pardo de Vera, hayan dimitido.

"Se produjo un error, que se detectó en febrero de 2021 y se ha tardado mucho tiempo en corregirlo, un tiempo inasumible. Yo tuve conocimiento poco antes de que lo conociese la opinión pública y me trasladé al día siguiente a Cantabria a dar la cara y pedir disculpas", ha admitido Sánchez.

"Dije que se iba a recabar toda la información para esclarecer los hechos y así se ha hecho. La política implica asumir responsabilidades y con estas dimisiones se asumen esas responsabilidades", ha explicado.

Precisamente este lunes la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, ha recibido a los presidentes de Cantabria y Asturias en un intento de resolver el fiasco de los 31 trenes que por un error de diseño no caben por sus túneles.

Miguel Ángel Revilla y Adrián Barbón exigen que se cumplan los plazos comprometidos y compensaciones por los graves retrasos. Los plazos se van a alargar previsiblemente unos 3 años al tener que variar las características de los trenes de vía estrecha.

Ambos presidentes se han mostrado molestos por no haber sido informados sobre la salida de los responsables de Renfe y la Secretaría de Estado de Transportes.

La ministra les ha conformado la gratuidad del Cercanías en sus respectivas comunidades hasta la entrega del nuevo material rodante de Renfe.