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El Ayuntamiento de Madrid ha autorizado el proyecto para la demolición parcial y reestructuración del paso elevado de Pedro Bosch, que conectará la calle Méndez Álvaro con Doctor Esquerdo y la plaza Conde de Casal, uniendo el distrito de Retiro y Arganzuela.

Así lo ha anunciado la delegada de Obras y Equipamientos, Paloma Martín, en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno municipal, en la que ha detallado que las obras comenzarán en marzo, "en unos 20 días", y se extenderán durante un plazo previsto de 12 meses, con un coste municipal de 11,2 millones de euros.

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En una primera fase, se suprimirá la "barrera urbana" que supone el paso elevado a lo largo de la calle Doctor Esquerdo sobre la avenida Ciudad de Barcelona, por lo que la movilidad discurrirá exclusivamente a cota de rasante de la calle.

Con ello, según Martín, se conseguirá una mayor "permeabilidad", en unas obras dirigidas a mejorar la vida urbana funcional de la zona y limitar el impacto paisajístico.

La delegada ha asegurado, al mismo tiempo, que las afecciones al tráfico serán las "mínimas posibles", en tanto que se dejará un canal de circulación abierto, aunque ha reconocido que "siempre generaremos alguna molestia".

Las obras también van dirigidas a "mejorar" la permeabilidad peatonal y ciclista entre los distritos de Retiro y Arganzuela, a través de una reconfiguración del paso elevado entre la calle Méndez Álvaro y las vías del tren, reconstruyéndolas hasta Ciudad de Barcelona.

La segunda fase del proyecto consistirá en la reurbanización de la calle Pedro Bosch entre Ciudad de Barcelona y la calle Méndez Álvaro "a ambos lados del paso elevado", tanto en la zona de parque en el lado de Arganzuela como de las aceras del lado de Retiro, dice el Ayuntamiento en una nota de prensa.

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Cuando terminen las obras, el eje resultante dispondrá de un carril por sentido para el transporte público y otro para vehículos privados, además de un carril bici bidireccional. Con ello, se permitirá que la conexión entre ambos distritos se pueda realizar tanto a pie como en bicicleta, transporte público o coche.

"La actuación va a mejorar muchísimo la vida de los vecinos", ha asegurado Martín, que también ha señalado que la demolición del paso elevado se realizará de forma muy similar a las obras del eje Joaquín Costa-Francisco Silvela, que tuvieron lugar en 2020.