Normalidad y sin incidencias en el transporte público madrileño que crece un 8% tras el regreso vacacional

Más viajeros pero normalidad. Esta ha sido la tónica este lunes en el transporte público en Madrid y no se ha registrado ninguna incidencia en el primer día laborable de la vuelta vacaciones.

Hay que salir a trabajar y los transportes madrileños han notado este lunes un incremento de pasajeros tras el parón estival, según la mayoría de viajeros.

El consejero de Transportes de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, ha manifestado que el uso del transporte público en la región ha aumentado un 8 por ciento en la hora punta de este primer lunes tras el final de las vacaciones respecto a la misma franja de la semana pasada, con un total de 80.401 viajeros en la red.

Con la capacidad del Metro al 50% aún quedan muchos madrileños por llegar. Por eso desde mañana, y de manera paulatina hasta el día 15, se refuerzan todos los medios de transporte con un incremento de las frecuencias del 20% en hora punta. De esta forma se espera que sólo se produzcan las aglomeraciones permitidas por Sanidad.

Garrido ha aclarado que, a pesar de que "se va reincorporando más gente a sus trabajos", en la actualidad la afluencia en los vagones de Metro se sitúa entre un 50 y un 45 por ciento de su capacidad máxima, tres personas por metro cuadrado.

Sin distancia, pero con mascarilla

"Funciona con normalidad y es absolutamente seguro", ha asegurado Garrido, quien ha añadido que los datos de posibilidad de rebrotes en el transporte público en "todos los estudios internacionales son bajísimos" y que están "todos por debajo del 1 por ciento".

"En Madrid no ha habido ningún rebrote asociado al transporte público", ha agregado el consejero, quien ha pedido que se recupere la "tendencia" del uso de los medios colectivos y se empiece a "ir abandonando los vehículos privados". Por último, ha recordado el uso obligatorio de la mascarilla en toda la red.

Este refuerzo, por tanto, no evitará imágenes de viajeros sin distancia de seguridad porque no es exigible en trenes, metros, ni autobuses. Sólo la mascarilla, que es la única medida de seguridad exigible.