Gran éxito de convocatoria en la Carrera por el Clima y el Desarrollo Humano y Sostenible. A pesar del frío y la niebla, nada ha impedido que corredores, aficionados, familias y miembros de la Cumbre del Clima (COP25) hayan participado en este acontecimiento pionero que ha nacido en Madrid.
En el parque Juan Carlos I, decenas de personas han visibilizado la necesidad de concienciar sobre la crisis climática y las desigualdades sociales y ambientales.
Corredores de todas las edades
A las diez de la mañana se han dado cita en la meta, corredores desde tres años hasta 70, una marcha formada por representantes de muchos países que han dejado por un tiempo su trabajo en la Cumbre del Clima para convertirse en embajadores’ de los diecisiete Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS del planeta).
Todos han recibido la insignia que los acredita como tal de manos de Javier Cortés, director de Localización del Programa de Ciudades del Pacto Global de Naciones Unidas y de Paloma Fernández de Outside Comunicación Integral, organizadora del evento.
Cortés ha destacado la fuerza tremenda del movimiento juvenil en relación con el medio ambiente. Sin embargo, cree que ya es el momento de que, ese gran interés, sea compartido por todos los ciudadanos, “hay que cambiar el chip”. Todos tenemos que reciclar y no hay que dejar a nadie atrás.
Objetivos de la carrera
Paloma Fernández ha explicado que el objetivo de la carrera ha sido dar a conocer los ODS, que son metas globales que deberían cumplir todos los países de aquí al 2030. “Cada uno de nosotros tiene mucho que hacer”. “A todos los participantes les hemos dado la insignia de los ODS, se han convertido en embajadores”. Al llevarla, cuando la gente pregunte qué es, “nuestros corredores explicarán su significado, y por tanto extenderán el mensaje de que somos guardianes del planeta”.
Entre los que han llegado a la meta, se encuentran niños como María (ocho años), que utiliza la ropa de su hermana y separa la basura en casa y Carlos (seis años) que siempre tira los residuos en las papeleras y recicla el agua de casa. Ellos son pequeños españoles que han corrido con sus padres, sin embargo, la Carrera del Clima se ha caracterizado por la alta participación internacional.
Entre 1,5 y 10 kilómetros
Izge es turca y ha llegado al final con sus hijos de tres y cinco años, han participado en la modalidad de 1,5 kilómetros. Miguel, venezolano, ha corrido 10 kilómetros, ha dejado por unas horas su participación en la Cumbre del Clima para estar en esta emblemática actividad deportiva, él es emprendedor de una firma de biotecnología, basada en el uso de las plantas, para purificar el aire.
Fabia es de Brasil y ha dejado sus obligaciones también en la COP25, para reivindicar con su presencia, el compromiso con el planeta. Representa a una empresa de drones y robots medioambientales.
Han participado también en la Carrera del Clima aficionados de Estados Unidos, Alemania, Singapur, India, Colombia, Haití, Ecuador y Panamá entre otros países.