Muchas empresas recurren a estas máquinas para eliminar olores, bacterias y, ahora, al Covid-19
ESTER DE LA GUÍA
Adiós a los olores desagradables, bacterias y ahora, además, al temido coronavirus. Gracias a estos pequeños aparatos, llamados ozonizadores.
Se trata de máquinas especializadas en crear átomos de oxigeno enriquecido destruyendo así las bacterias en cuestión de segundos. Es una de las armas con las que las empresas se blindan contra el Covid-19.
El temor al contagio ha aumentado la demanda de estos servicios. Cada vez son más quienes quieren respirar un ambiente limpio y lo más importante, saludable. Compañías de transportes de viajeros, grandes superficies, y restaurantes, entre otros, aumentan su demanda, todos quieren sus servicios.
“Hemos tenido un aumento de más del triple incluso hemos colapsado en Italia”, nos cuenta Ángel Manuel Sereno Marchante, el director general de Cosemar Ozono.
La incertidumbre, inquietud de información y miedo han multiplicado las llamadas. Reciben al día más de 150.
Sereno transmite un mensaje de tranquilidad: “Hay tecnologías para controlar la desinfección y desactivarla en tan solo 30 minutos. Con el ozono los microbios quedan eliminados y las toxinas destruidas”.
Es una herramienta con capacidad de eliminar el 99,9% de los microrganismos y, además, el residuo que deja no es perjudicial para personas, plantas o animales. Normalmente actúan para prevenir, pero ahora les llaman para tratar de exterminar el virus.