Vídeo: REDACCION | Foto:Telemadrid
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Quince puntos negros hay en las carreteras madrileñas que dependen del Gobierno central. Tramos en los que se concentran muchos accidentes y que están señalizados para que los conductores tengan especial cuidado. En 2017 murieron 125 personas en vías como la A-6, A-1, la A-2, la M-50 o la M-40.

Son tramos que el Ministerio de Fomento ha declarado tramos de concentración de accidentes, por su especial peligrosidad.

A ellas, habría que sumar las que dependen de la Comunidad de Madrid o del propio Ayuntamiento de la capital, como la Calle 30.

Los datos están ahí, en 2017 hubo 125 muertes en las carreteras de Madrid. Ese año las estadísticas contabilizaron 16.248 accidentes con víctimas en las carreteras regionales.

Telemadrid ha recorrido uno de estos tramos, situada en la A-5, en el km 22 al 23, donde los accidentes son constantes y eso que cuenta con un firme en buen estado, sin baches, ni curvas peligrosas.

"Coinciden mucho tráfico de entrada y salida"

David Fernández, experto en movilidad y seguridad vial de RACE, señala que no siempre estos puntos negrosse deben al mal estado de conservación, sino que sobre ellos "coinciden mucho tráfico de entrada y salida" y resalta además como causa de esta siniestralidad el exceso de confianza o la distracción que tenemos con el uso del móvil.

Fernández incide, además, que el gran peligro se produce en las carreteras secundarias donde tienen lugar el "20% de los accidentes y el 80 por ciento de las víctimas".