Los supermercados españoles han reclamado este miércoles ante la Unión Europea que las autoridades comunitarias modifiquen algunas medidas medioambientales para evitar el encarecimiento de los productos básicos.
Entre ellas la nueva norma de envases de plástico que elevará el precio final y se aplicará progresivamente hasta 2030.
Supondrá un coste adicional de más de 20.000 millones de euros, que acabará repercutiendo en el consumidor, según supermercados y distribuidores.
El Parlamento Europeo aprobó en abril nuevas medidas para hacer los envases más sostenibles y reducir los residuos de envases en la UE.
El Reglamento, explicaron fuentes de la UE, busca hacer frente al aumento de los residuos, armonizar las normas del mercado interior e impulsar la economía circular.
Las normas, que se han acordado provisionalmente con el Consejo, incluyen objetivos de reducción de envases (5 % para 2030, 10 % de aquí a 2035 y 15 % para 2040) y exigen a los países de la UE que reduzcan, en particular, la cantidad de residuos de envases de plástico.