Termina la restauración del artesonado de Santa María la Blanca en Canillejas
MARTA LICERAS VELA
Es una auténtica joya mudéjar porque es el ejemplo de carpintería de lazo más importante de Madrid. Hablamos de Santa María la Blanca, en Canillejas.
En 2017 se hicieron las primeras catas y se descubrió que bajo una bóveda de cañizo y yeso se ocultaba esta armadura de madera de gran riqueza por su poco frecuente tallado y decoración con 8 estrellas de puntas entrelazadas.
La iglesia, en su origen, debió ceñirse al actual presbiterio y después se amplió. Tras su bóveda encamonada se encuentra también una armadura de madera con tirantes. Se construyó como lugar de paso a media camino entre Madrid y Alcalá de Henares, por lo que fue lugar de descanso para viajeros y, según los estudiosos, Santa Teresa de Jesús pasó por este lugar en varios momentos de sus viajes hacia Alcalá y Pastrana.
En la actualidad está en un entorno urbano que tuvo su mayor desarrollo en los años 60, formando parte del municipio original de Canillejas.
La consejera de Cultura de la Comunidad de Madrid, Marta Rivera de la Cruz, ha explicado que se han invertido más de 375.000 “en la puesta en valor y recuperación de esta joya mudéjar del siglo XVI “.
El pasado mes de noviembre el Gobierno regional declaró esta iglesia Bien de Interés Cultural por su relevancia histórica y cultural además de su valor arquitectónico y artístico. Rivera de la Cruz ha anunciado que terminados los trabajos en el presbiterio también se restaurará la nave.