Blanca y Miguel, un matrimonio de ancianos de Móstoles, están viviendo una situación dramática. Tienen alquilado un piso en Fuenlabrada a una familia, que no les paga desde antes de la pandemia.
Esta no quiere devolverles el piso y dicen que les está costando la salud. Ahora la empresa Desokupa les ha ofrecido su ayuda.
Blanca padece cáncer y atrofia, y Miguel tiene Parkinson. A sus 76 años utilizaban los ingresos de este piso para afrontar sus gastos médicos.
Los inquilinos de esta pareja mayor mantienen su negativa a marcharse del piso si no es mediante una orden judicial.