La catástrofe sigue castigando Venecia y la ciudad sigue totalmente abnegada.
El 70% de la ciudad italiana está inundada, los lugares más emblemáticos clausurados y los comercios obligados a cerrar.
La previsión no es alentadora y se puede prolongar varios días más. El gobierno ha declarado el estado de emergencia y destinará 20 millones de euros para enmendar la catástrofe.