Cuando un artista se estrella en un escenario

El cantante Hiroki Takahashi, que sufría el pasado sábado una terrible caída sobre el escenario mientras interpretaba el tema principal de ‘Dragon Ball Z’, podrá ser trasladado a Japón, donde acabará de recuperarse.

Ocurría en el Wizink Center de Madrid durante el concierto del icónico anime, al que acudieron los seguidores de la serie, quienes se han volcado en las redes con este trágico incidente que provocaba al artista graves lesiones.

El concierto de Hiroki Takahashi (cantante original de Dragon Ball) en el Wizink Center de Madrid terminó amargamente cuando cayó gravemente del escenario. Era la última canción. pic.twitter.com/budSlW2hSf

— Miguel Velázquez (@MiguelVelM) 19 de enero de 2020

Era el momento más esperado del concierto. Takahashi interpretaba el tema principal de ‘Dragon Ball’. Pero la caída dispuso un trágico final.

Otras caídas

No es el único caso de este tipo que conocemos. Seguro que recordáis alguno de los siguientes.

El cantante Justin Bieber tampoco calculaba bien la longitud del escenario y en uno de sus paseos entre canción y canción para saludar a sus fans, se le acababa el escenario. Y como él, el cantante de Maná Fernando Olvera, caía de espaldas sobre sus fans, mientras el guitarrista sin percatarse, continuaba tocando la canción.

Los cables son los grandes enemigos de los artistas. Que le pregunten a Melendi, que en un concierto de Santander se tropezaba con uno de ellos y caía de culo al suelo. Eso sí, siempre con actitud y animando al público a seguir con el tema.

Pero para caída de cable, la de Juan Gabriel. Con el micrófono en la mano realizaba un baile de lo más movido, pero el cable no dio para más y acabo tirando del cantante hacia atrás. Hasta las más divas tienen sus percances, la reina del Pop, Madonna, caía desde lo alto de la escalera por culpa de su capa.

Pero lo más importante de caer, es continuar, y el ejemplo que lo demuestra es Isabel Pantoja, que tropezaba realizando una vuelta muy flamenca, pero ni eso no la detuvo. Y de perdidos al río, o a la piscina, o eso debió pensar la estadounidense Demi Lovato que tras escurrirse sobre un escenario mojado a orillas de una, decidió que lo mejor era tirarse a ella y bañarse con sus fans.