Imaginen tener nuestra casa a 22 grados, temperatura ideal, durante todo el año y con un consumo de electricidad casi nulo. Es lo que ha conseguido Miren Rivas, una arquitecta de Bilbao. Se trata de un sistema de ventilación que ha diseñado y que distribuye inteligentemente el aire frío o caliente, según sea verano o invierno.
La arquitecta especialista en sostenibilidad y Passivhaus, Miren Rivas, ha explicado a Telemadrid en qué consiste este sistema de aislamiento y ventilación que ya se ha puesto en práctica en varias casas en el País Vasco.
Consumo casi nulo
El Passivhaus es un estándar arquitectónico en auge, en España todavía está iniciando su camino. Una casa pasiva o Passivhaus es de consumo casi nulo.
Con un pequeño aporte energético (uno o dos radiadores en toda la vivienda) se calienta una casa de 100 m2. Como está tan bien aislada y es hermética, no tiene pérdidas energéticas, por lo que la temperatura se mantiene estable durante el día y durante la noche.
Además, por las mañanas en invierno, sin encender la calefacción, no hace frío. De esta manera, cuanto menor sea el consumo de energía, menor es la posibilidad de que se dé la pobreza energética en un hogar.