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La sede del Samur Social está cerrada por una invasión de chinches. Casi medio centenar de personas han tenido que ser realojadas y los trabajadores han sufrido picaduras. Se ha activado el protocolo anti chinches y técnicos de control de plagas del Ayuntamiento han evaluado el estado del edificio.

El pasado lunes se detectó el primer caso y se activó el protocolo de actuación, tal y como ha comentado Pepe Aniorte, Concejal de Familias, Igualdad y Bienestar. "Aplicamos el protocolo como siempre en este tipo de situaciones. Además se ha actuado rápidamente, por lo tanto, para este tipo de cuestiones, es fundamental".

Los trabajadores de Samur Social han tenido que depositar su ropa en bolsas, llevar trajes especiales y aplicarse duchas especiales. Sin embargo, las exhaustivas medidas no han impedido que una de las empleadas haya contaminado su propia casa.

La primera desinfección tuvo lugar el miércoles, pero la plaga reapareció en otra planta de la sede, por lo que ha tenido que ha tenido que acudir a la sede un técnico de control de plagas del Ayuntamiento para inspeccionar el edificio y evaluar las posibles medidas de desinfección

El Ayuntamiento de Madrid ha manifestado que no se trata de un problema de higiene, sino que se debe al hecho de que la gente que acude a los centros vive en la calle. "Este tipo de plagas es habitual, además en esta época del año, especialmente", ha explicado Pepe Aniorte.