Vídeo: MIGUEL PEDRERO | Foto:Telemadrid
(Actualizado

Europa se expone a un nuevo flujo masivo de inmigrantes procedentes de Siria, tras la escalada bélica entre Turquía y ese país. La muerte de 33 soldados turcos por un ataque sirio y las posteriores operaciones de castigo turcas han encendido de nuevo la región. Ankara busca ahora el apoyo de la OTAN y de la Unión Europea con el arma de los refugiados como amenaza.

Combates en Idilb, último bastión rebelde sirio. El Ejército turco ha perdido allí 33 soldados en un ataque de la aviación rusa o siria. Según mandos rusos, los turcos no deberían estar allí.

Soldado turco | REDACCIÓN

La respuesta de Ankara no se ha hecho esperar. Por tierra y por aire, el Ejército de Ankara ha golpeado a las fuerzas de Bacher el Asad como represalia.

En el fondo está el control de una zona que Turquía considera clave, a las puertas de su frontera.

Para Damasco y Moscú, se trata de eliminar el último enclave rebelde.

Rusia, aliado de Siria, ha enviado dos fragatas de la Flota del Mar Negro equipadas con misiles de crucero Kalibr-NK al mar Mediterráneo, informó hoy a la prensa el portavoz oficial de la flota, Alexéi Rúlev.

Erdogan busca el apoyo de la Unión Europea y de la Alianza Atlántica, con la amenaza de volver a provocar una nueva crisis de refugiados. El Gobierno turco habría dado libertad a los refugiados sirios para que se dirijan a Europa. Algunos de los más de tres millones y medio se han dirigido de inmediato a las playas y puestos fronterizos con Grecia, que Atenas ha cerrado a cal y canto.

Jens Stoltenberg, secretario general de la OTAN | REDACCIÓN

Desde la OTAN se pide el fin de las hostilidades y se respalda a Turquía. Los países de la OTAN han mostrado este viernes su solidaridad con Turquía ante el conflicto en Siria y han urgido a Rusia y al presidente sirio, Bachar al Asad, a que detengan los bombardeos indiscriminados en la norteña región de Idlib.

Ante el aumento de la tensión, el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, ha advertido del riesgo de caer en una gran confrontación militar internacional abierta", por lo que "la escalada actual se debe detener de manera urgente".