El juez procesa a Rato por presunta corrupción, blanqueo y elusión fiscal

El juez de Instrucción número 31 de Madrid, Antonio Serrano-Arnal, ha dado por concluida la instrucción que tenía abierta sobre el patrimonio del exvicepresidente del Gobierno español y exdirector gerente del Fondo Monetario Internacional, Rodrigo Rato, y propone juzgarle junto a otras 11 personas y dos entidades por los delitos de corrupción en los negocios, blanqueo de capitales y varios delitos fiscales.

En el auto de transformación de las diligencias en procedimiento abreviado, el magistrado da 20 días al ministerio fiscal y la Abogacía del Estado para que presenten su escrito de acusación o pidan el sobreseimiento de las actuaciones. Es previsible que las defensas presenten recurso contra este auto.

Rato ya fue condenado a cuatro años y medio de cárcel por el caso de las ‘tarjetas black’ de Caja Madrid y fue absuelto en la causa sobre la salida a bolsa de Bankia.

En el auto, el juez explica que Rato fue nombrado presidente de Caja Madrid en enero de 2010. En ese momento contrató a María Teresa Arellano como secretaria, que acabó siendo directora de Coordinación de Presidencia y de Comunicación, pieza clave en la contratación de la sociedad Lateralmente, controlada por Alberto Portuondo que, según el instructor, se repartió comisiones con la firma Kranodara, propiedad del exvicepresidente.

El juez entiende así que el patrimonio de Rato no tiene un origen claro y pone el foco sobre los contratos publicitarios de Bankia, que podría constituir un presunto delito de corrupción entre particulares. De hecho, entre los procesados están las agencias de publicidad Zenith y Publicis.