Son unas de sus salas más importantes y hemos podido acceder a ellas, acompañando en su visita a la reina Letizia. Se trata de las zonas de restauración y encuadernación de la Biblioteca Nacional, donde sus trabajadores recuperan y tratan auténticas incunables de la literatura, cuidando hasta el más mínimo detalle.
Allí hemos podido comprobar el proceso que se realiza con ejemplares de los siglos XVII al XX y las principales técnicas de cosido, acabado y decoración. Un trabajo cuidado y minucioso. En las salas de restauración y encuadernación se trabaja en la actualidad en un injerto en un grabado de Piranesi y en un manuscrito autógrafo de Lope de Vega
El recorrido por la Biblioteca Nacional ha continuado por uno de los depósitos del departamento de Bellas Artes hasta llegar a la Sala Cervantes, donde se guardan algunos de los materiales representativos de las colecciones de la BNE, como el Códice Madrid I de Leonardo da Vinci, una de las joyas de la Biblioteca o un ejemplar de la primera edición del Quijote.