Las concentraciones convocadas en apoyo al rapero Pablo Hasel durante este martes han registrado cargas y altercados en varias ciudades catalanas como Barcelona, Girona, Lleida, Vic, o Reus, donde los manifestantes se han enfrentado a los agentes y se han producido daños en el mobiliario urbano.
15 personas han sido detenidas y se han registrado 33 heridos, entre ellos ellos 17 agentes de los Mossos d'Esquadra. De los 33 heridos, uno se encuentra en estado grave y el resto han sido leves.
El arresto del rapero a primera hora de este martes en la Universidad de Lleida donde se había encerrado para evitar ser detenido para cumplir la pena de prisión a la que le condenó la Audiencia Nacional ha llevado a la convocatoria de varias concentraciones de apoyo en distintos puntos de la geografía española.
En Barcelona, la protesta ha congregado a unas 1.700 personas en la plaza Lesseps, cortando General Mitre, desde las 19.00 horas al grito de 'Libertad Pablo Hasel', mientras un grupo de los congregados rapeaban con un micrófono y un altavoz.
Durante la misma, algunos participantes han lanzado objetos pesados y botellas de vidrio a los Mossos y los agentes han respondido disparando balas de foam.
Además, ha dejado contenedores y motos quemadas y algunas vías afectadas por los altercados entre participantes y agentes de los Mossos d'Esquadra.
En Girona, la convocatoria ha sido secundada por unas 2.000 personas, que se han congregado a partir de las 20.00 horas en la plaza 1 d'Octubre. Los participantes se han dirigido hacia la sede de la Generalitat entre los cánticos 'Catalunya antifascista' o 'Libertad Pablo Hasel'. Algunos de ellos han quemado contenedores y han reventado aceras para tener objetos pesados similares a piedras para lanzar a los Mossos d'Esquadra. Otros, por su parte, han recuperado botellas y objetos del contenedor de vidrio para arrojarlos a los agentes.
Asimismo, han causado daños en una entidad bancaria en la zona de Jaume I con calle Sèquia, que han atacado con fuego, y desperfectos en señales viarias en la zona. El acto de protesta ha dejado al menos seis manifestantes heridos, según cifras la entidad Sanitaris per la República.
En Lleida, la concentración ha reunido a unas 400 personas en la plaza de la Catedral, según cifras de Policía Local. Los manifestantes han tirado huevos delante de la sede del PSC, en la Avinguda Blondel, han coreado consignas contra el PSOE y Unidas Podemos, y se han dirigido en dirección a la Subdelegación del Gobierno en la capital leridana.
Además, han quemado una moto de la Guardia Urbana y han agredido a sus agentes, con lanzamiento de adoquines y material pirotécnico contra la línea policial en la zona de la Subdelegación.
En otras poblaciones catalanas de menor tamaño poblacional también se han registrado incidentes durante los actos de apoyo al rapero. Así, en Vic (Barcelona) los congregados han lanzado piedras alrededor de la comisaría y los juzgados han provocado destrozos en el edificio como rotura de cristales, mientras que en Reus (Tarragona) también se han registrado incidentes.
La concentración celebrada en Valencia ha acabado también con algunas cargas policiales e incidentes, como el vuelco y quema de contenedores en las inmediaciones de la plaza del Ayuntamiento. Los participantes se han congregado a partir de las 19 horas en la plaza del Ayuntamiento, con distancia de seguridad entre los participantes, algunos ataviados con máscaras valencianas en las que se leía la frase 'llibertat exp' y una raya roja.
En Palma de Mallorca, hasta 200 de personas, según el primer recuento oficial de la Policía Nacional, se han concentrado en la plaza de España sin que se registraran incidentes relevantes.
La protesta ha tenido lugar a las 19.00 horas, junto a la misma vez de otra que se ha producido en sa Bassa, en Manacor. En Menorca, concretamente en Mahón, también ha habido una concentración en la plaza Miranda.
Todas las iniciativas han sido convocadas a través de las redes sociales.
Pau Rivadulla Duró, conocido como Pablo Hasel, ha sido detenido, este martes, en el rectorado de la Universidad de Lleida, donde se había encerrado junto a decenas de seguidores para dificultar su arresto.
Posteriormente, ha sido trasladado a la prisión de Ponent, en Lleida, para cumplir la pena de 9 meses que le impuso la Audiencia Nacional en 2018 por enaltecimiento del terrorismo, por alabar en 2014 en Twitter a ETA y los Grapo, y que fue ratificada por el Supremo en una causa en la que también fue condenado a 24.300 euros de multa por injurias a la corona y a las fuerzas de seguridad.