El Museo Nacional del Prado ha presentado este lunes 19 de octubre la exposición 'El Greco en Illescas', que incluye cinco obras del pintor que se consevan en el Santuario de Nuestra Señora de la Caridad de Illescas (Toledo).
"Nos muestran a un pintor especialmente original, estas telas muestran a ese pintor en el momento que inicia el final de su carrera", ha señalado la jefa de Pintura Española del Renacimiento del Museo del Prado, Leticia Ruiz.
El Prado, con el apoyo de Funcave, el patrocinio de la Fundación Amigos del Museo del Prado y la colaboración de la Comunidad de Madrid, puede ofrecer así a sus visitantes la oportunidad de contemplar en la sala 9 B, hasta el próximo 28 de febrero, el conjunto de pinturas realizadas por el Greco para este templo, entre 1600 y 1605, junto a las telas del retablo mayor del Colegio de Doña María de Aragón (1597/1600), conservadas en el museo.
La producción final del pintor, a la que pertenecen estos dos conjuntos, está caracterizada por el "completo desinterés" por las convenciones espaciales, el uso de modelos "alargados y llameantes", creados con pinceladas "cada vez más deshechas y vibrantes"; un cromatismo reducido; y una iluminación "relampagueante".
Para la jefa de Pintura Española del Renacimiento del Museo del Prado, el Greco va a encontrar el "mayor desconcierto" por parte de sus contemporáneos y, durante un siglo y medio, "el rechazo, incluso el insulto". "Estas obras nos muestran toda la capacidad del pintor para adelantarse a su época", ha asegurado. En su opinión, estos dos conjuntos muestra, de forma "muy natural", a ese pintor "extraordinario" en un momento en el que se encamina a ese Greco final "tan desconcertante" para sus contemporáneos.
Los lienzos, según ha destacado Ruiz, se han vuelto a tensar debido a que con ese formato "siempre tienen problemas" y han vuelto a regenerar el barniz. "Los Grecos vuelven a su segunda casa una pequeña temporada", ha celebrado.
La muestra incluye cinco obras que el Greco realizó para uno de los espacios religiosos "más notables" de Toledo: el Hospital de Misericordia y Beneficencia de Illescas, conocido como Hospital de Caridad, donde se custodia una pequeña imagen mariana (la Virgen de la Caridad) "de gran devoción popular".