Un hombre logra evadir una denuncia por violencia machista al cambiar de género

Un hombre se ha librado de una denuncia por violencia machista al cambiar de género, en Cataluña. La denuncia fue presentada por su ex pareja que, se ha quedado sin el amparo de la Ley de Violencia Machista, ya que la acusación ha pasado a juzgarse como un problema de violencia doméstica.

La relación entre la ex pareja comenzó en 2011, y empezó a torcerse después de 10 años juntos. Entorno a 2020, él comenzó a cambiar, decía que se sentía mujer y en momentos íntimos quería ponerse ropa interior femenina, según cuenta la víctima, quien en un principio pensó que podía ser fetichismo. Pero, el acusado acabo pidiéndole permiso para hormonarse, a pesar de que nunca había querido cambiar de sexo.

En este punto, la víctima, decidió terminar la relación, pero continuaron viviendo juntos como amigos, debido a la necesidad económica. El problema comenzó cuando el presunto agresor comenzó a ejercer violencia de tipo sexual y económica sobre la víctima, que ha denunciado que cada vez que se duchaba, 'se metía en la bañera y me toqueteaba, al igual que por la noche, cuando creía que yo estaba dormida, se metía en la cama para tocarme'.

Hasta que el pasado 15 de agosto denunció los golpes, insultos y agresiones recibidas, tras un enfrentamiento, y se encontró con que había cambiado su nombre por el de una mujer en el registro civil, al igual que su sexo, aportando un informe psicológico. Este hecho ha conseguido que para la justicia sea un caso de conflicto domestico y no un caso de violencia de género.

“Simplemente porque ha habido un cambio de nombre, estamos en uno de los elementos esenciales de protección a las víctimas que nos falla”, ha detallado sobre el caso Meritxell Cabezón, abogada técnica en violencia intrafamiliar y representante de la víctima. Cabezón, duda de la validez de los documentos aportados por el supuesto maltratador en el Registro Civil.