Las medidas de Semana Santa no se endurecen pero sí los controles de tráfico

El Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas han optado por no adelantar ni el cierre de la actividad esencial ni el toque de queda a las 8 de la tarde, pero sí se van a incrementar los controles de tráfico en los trayectos de corto recorrido. Estas son las conclusiones del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, según han explicado la ministra de Sanidad, Carolina Darias, y el titular de Interior, Fernando Grande Marlaska, al término de su reunión con los consejeros autonómicas de sanidad.

Darias había sondeado a varias consejerías para, por ejemplo, adelantar el cierre de las actividades no esenciales a partir de las 20 horas, ante la creciente preocupación por la evolución al alza de la pandemia. Pero ya a lo largo del día, seis autonomías habían manifestado su rechazo a un posible endurecimiento de las restricciones aprobadas el pasado 10 de marzo para la Semana Santa, entre ellas -como viene siendo habitual- la Comunidad de Madrid, pero también Cataluña.

En el lado contrario, se encuentra Baleares que ya el martes aprobó el cierre perimetral -que con Canarias eran las únicas que no lo tenían en vigor por su favorable situación-. Esta medida prohíbe a sus ciudadanos viajar desde este viernes a la Península hasta el 12 de abril, salvo por motivos profesionales o fuerza mayor como ir al médico. Y también, favorable a un endurecimiento se ha posicionado Castilla y León, que incluso aceptaba adelantar el toque de queda a las 20.00 horas.

En cualquier caso, Darias ha recordado que las comunidades tienen competencias para poder endurecer las restricciones porque el plan acordado el pasado 10 de marzo es un marco de mínimos adaptable a la evolución de la pandemia, que este miércoles ha registrado otro leve ascenso de la incidencia acumulada hasta los 132 casos por cada 100.000 habitantes en 14 días.

En las últimas 24 horas, se han registrado 320 fallecidos, 19 más que los contabilizados ayer martes.

Solo una comunidad autónoma se mantiene por debajo del nivel de riesgo calculado en 50 casos por 100.000 habitantes en los últimas 14 días; se trata de la Comunidad Valenciana, con 30,2 mientras que 10 Comunidades, entre ellas Madrid, han sufrido repuntes en su índices acumulados.

En su comparecencia, la ministra Darias ha pedido a las comunidades que mantengan las vacunaciones durante los días festivos de Semana Santa, con el objetivo de retomar "el buen ritmo", para lo que contribuirá que España dispone de algo más de 1.902.000 de dosis tras el parón de 9 días de vacunación con el suero de AstraZéneca, que hoy se ha reiniciado una vez que las autoridades sanitarias la hayan considerado segura.

64.200 agentes velarán por el cumplimiento de las restricciones vigentes

Aunque no se endurecen las restricciones, 64.200 agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil velarán por el cumplimiento de las medidas vigentes en la actualidad, entre ellas el cierre perimetral de las comunidades a partir del 26 de marzo.

Marlaska ha anunciado que la Dirección General de Tráfico va a intensificar la vigilancia y control porque "seguimos en una situación excepcional y debemos permanecer en casa y reducir la movilidad al máximo". "No cabe todavía planificar trayectos de largo recorrido", ha dicho tajante el ministro, quien ha dejado claro que la vigilancia se centrará especialmente en los viajes cortos.

Marlaska se ha referido también a las críticas que han surgido los últimos días ante la paradoja de que los españoles estén bajo cierre perimetral para trasladarse a otra comunidad, pero los turistas extranjeros puedan viajar a España. Esta cuestión responde a los acuerdos de la Unión Europea, puesto que no se ha suspendido la libre circulación de personas, aunque sí se han establecido medidas para garantizar la salud pública, que deben respetar los turistas.

La Comunidad de Madrid ha pedido el control fronterizo estricto, según fuentes del gobierno regional, según las cuales Cataluña y Baleares también se han sumado a esta petición. Precisamente, el Consell de Formentera ha solicitado al Gobierno que cierre el archipiélago a los vuelos internacionales para evitar que lleguen turistas extranjeros durante la Semana Santa.